Intervención durante la discusión de la fracción
XXI del artículo 73 constitucional, en materia de legislación procesal penal
única
Sesión extraordinaria
Cámara de Diputados
17 de julio de 2013
17 de julio de 2013
Compañeras y compañeros:
Es principal responsabilidad del Estado mexicano
hacer que en las condiciones de vida de todos los mexicanos sean lo
suficientemente adecuadas para que todos y cada uno de nosotros, los habitantes
de este país, podamos realizar nuestros anhelos.
Para ello se necesitan muchas cosas que realizar,
pero destaca una muy importante, la condición esencial para poder vivir
realizando las actividades cotidianas de cada uno y para poder estar trabajando
de una manera positiva, de una manera tranquila, es que todos los habitantes de
este país gocen de varias cosas; primero de seguridad, de un estado de derecho
que garantice que haya concordia social, y donde no la haya, haya justicia. Y
como lo dicta nuestra Constitución, que esa justicia sea pronta y expedita.
Ahora nos encontramos en un momento histórico
esencial para el desarrollo de la vida cotidiana en este país, de poder hacer
un salto cuántico al desarrollo de la justicia. Por desgracia nuestra condición
de federación y la condición de inseguridad que se ha tornado muy difícil en
nuestro país, por la delincuencia organizada principalmente y las condiciones
socio-económicas políticas globales, nos ha llevado a que tengamos un sistema
penal muy inadecuado.
Hay que tomar en cuenta varias cosas, compañeras y
compañeros. En primer término los compromisos internacionales que México ha
asumido y la responsabilidad que manda la Constitución a partir de la reforma
de 2011 en materia de derechos humanos, de tener cabalmente garantizados los
derechos humanos en el país, y uno de los derechos humanos que más es afectado
es el derecho a tener una justicia cabal en el país, porque nuestro sistema
inquisitorial que data del régimen colonial inquisitorial no lo hemos
eliminado, y no se ha eliminado por desgracia por mucha conveniencia de los
gobernantes autócratas que hemos tenido, y así en nuestro país este sistema lo
hemos rechazado de una manera muy clara a partir de 2008, mandando a las
entidades federativa del país y a la misma Federación, migrar del sistema penal
inquisitorio a un sistema penal oral acusatorio.
Así quiero mencionarles que ahora nos encontramos
ante la reforma de la fracción XXI del artículo 73 constitucional en materia de
legislación penal procesal única, y tenemos también varios cambios que facultan
al Congreso de la Unión en cuanto a la fracción XXI inciso a), para expedir
leyes generales en materia de secuestro y trata de personas, que ambos delitos
verdaderamente afectan de una manera terrible a la sociedad, y para establecer
penas mínimas penales y sus sanciones, así como establecer leyes generales que
contemplen la distribución de competencias y las formas de coordinación entre
la Federación, las entidades federativas y el Distrito Federal, como con los
municipios, para que este entramado jurisdiccional no sea ápice para que los
delincuentes se aprovechen de ellos y las víctimas se vean totalmente
despojadas de sus derechos.
Asimismo, estamos estableciendo reformas para que
el Congreso de la Unión tenga facultades para legislar en delitos y faltas
contra la federación y las penas y sanciones que por ellos deban de imponerse,
así como legislar en materia de delincuencia organizada.
Ahora bien, compañeros, esta legislación es
producto de un consenso multipartidista muy importante, que empieza desde la
Cámara de Senadores, en donde el 14 de febrero de 2013, el 9 de abril de 2013,
el 24 de abril de 2013 y el 29 de abril de 2013, presentaron diferentes
senadores, del Partido Acción Nacional, del Partido Revolucionario
Institucional, del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática
y del Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México, estas
reformas que ahora estamos a punto de votar.
Ahora bien, el 29 de abril de 2013 el Senado aprobó
la minuta y el 30 de abril de 2013 esta honorable Cámara de Diputados recibió
la minuta que ha sido dictaminada por la Comisión de Puntos Constitucionales,
de la cual soy secretario.
Como ustedes saben, el origen de un nuevo sistema
penal para la República Mexicana tuvo su nacimiento con las reformas
constitucionales de 2008 y así esta etapa de implementación del sistema penal
oral y acusatorio ha tenido un muy lento desarrollo, así tenemos 15 entidades federativas
que aún se encuentran en su etapa de planeación, que son: Coahuila, Veracruz,
Aguascalientes, Sinaloa, Quintana Roo, Baja California Sur, Colima, Querétaro,
Guerrero, Jalisco, San Luis Potosí, Sonora, Hidalgo, Campeche y Distrito
Federal. En la etapa de entrada en vigencia se ubican los estados de Tlaxcala,
Tamaulipas, Michoacán, Tabasco y Puebla. Finalmente se encuentran en operación,
mi estado natal Chihuahua y se encuentra estado de México y Morelos. Y en
operación parcial se encuentran Chiapas, Oaxaca, Nuevo León, Zacatecas,
Durango, Yucatán, Guanajuato y Baja California Sur.
Compañeras y compañeros, es inaceptable que a cinco
años de esta reforma ni siquiera la mitad de las entidades haya implementando
el sistema, manteniendo a los gobernados bajo el yugo del sistema inquisitorio.
Los principales problemas al contar con una
legislación procesal por cada entidad son diversos, se tienen 33 legislaciones
adjetivas en materia penal, con 33 criterios diversos, que provocan una gran
oportunidad a los delincuentes. Ya lo mencionó otro compañero, de trasladarse
de un estado a otro, etcétera.
La unificación y sistematización de criterios entre
las 32 entidades federativas nos da una mejor coordinación y operadores
jurídicos del nuevo sistema de justicia penal, con mayor certidumbre jurídica
para todos los involucrados.
La reforma penal no es algo novedoso, se empezó
desde 49, 58 y 63. En el Partido Acción Nacional impulsamos las reformas que
requiere el país, tanto desde el gobierno como fuera de él.
Es por ello que apoyamos esta reforma en comento,
la cual tendrá como consecuencia una mayor certeza jurídica para el pueblo
mexicano, ya que desde el momento en que hay presentada una acusación hay una
intervención judicial, junto con el Ministerio Público, que deja de tener esa
facultad omnipotente que fue causal de múltiples y ha sido causal de múltiples
abusos.
Ahora vamos a tener una justicia que le garantizará
al detenido el pleno ejercicio de sus derechos humanos y a las víctimas el
pleno ejercicio de su reparación. Amén de que también se establecerá un sistema
de resolución de controversias de querella necesaria, en donde se ven afectados
nada más intereses particulares y muy fácilmente se pueden resolver múltiples
problemas y quitarle el enmarañamiento que tiene el sistema penal mexicano
respecto de juicios que tienen poca relevancia porque son meramente privados y
ahora se pueden liberar.
Los insto, por favor, compañeros y compañeras, a
que aprobemos esta reforma histórica para el bien del país y la justicia.
Muchas Gracias.
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